Dolor articular en invierno

Las bajas temperaturas son las causantes de infinidad de males en el organismo. Entre los más importantes destacan los resfriados tradicionales, la gripe y demás infecciones causadas por las bajas temperaturas del invierno. Además cuando hace frío, como en estos días,  nuestros músculos aumentan su contracción haciendo que las articulaciones se tensen produciéndose rigidez. Esto hace que aparezcan y aumenten numerosas lesiones y molestias impidiendo que nos movamos con total normalidad.

A lo largo de todo el invierno, sobre todo en los meses de noviembre, diciembre, enero y febrero los músculos permanecen más contraídos que el resto del año, algo que hace que las articulaciones también se muestren más rígidas, ya que tanto los tendones como la totalidad de las fibras musculares están más contraídas que de costumbre, lo que genera una presión enorme en las articulaciones que en muchos casos acaba por provocar dolor, sobre todo en casos en los que tenemos antecedentes de fracturas articulares u óseas.

En muchas personas la sensación provocada por el frio es tal que las articulaciones afectadas dejan de responder de manera correcta. Por ejemplo, los dedos, una de las partes más afectadas, pierden movilidad y se quedan casi rígidos impidiendo que podamos coger objetos con fuerza.

Para evitar esto es importante que tengamos en cuenta los efectos que las bajas temperaturas tienen sobre nuestro organismo. Los músculos no se encuentran igual cuando hace calor o frío, y es que es importante que adquiramos una serie de buenos hábitos para evitar lesionarnos. Es primordial que protejamos nuestras articulaciones siguiendo una serie de consejos:

  1. La alimentación es muy importante a la hora de prevenir lesiones. Evitar dentro de lo posible las retenciones de líquidos producidas por dolencias como la artritis, el reuma, el exceso de ácido úrico… Para ello evitaremos consumir alimentos ricos en purinas, e ingerir productos que faciliten la eliminación de líquidos y toxinas como por ejemplo la cola de caballo, o cualquier tipo de té. La gelatina es un alimento aliado de las articulaciones, y es por su alto contenido en glicina y prolina, dos aminoácidos que intervienen activamente en la construcción de las estructuras conjuntivas del cuerpo humano, como por ejemplo los tendones. La gelatina contiene altas dosis de colágeno, uno de los principales componentes de los tendones. Este aporte hará que tengamos unas articulaciones más fuertes y resistentes.
  2. El ejercicio físico para mantener unas articulaciones activas, es primordial. Para ello no descuidaremos la práctica deportiva, y es que el movimiento articular generado por el ejercicio ayuda a fortalecer los músculos y mejora la circulación en esas zonas. De esta manera aumenta el aporte nutricional mediante el cual se ven fortalecidos.
  3. Será muy importante aislar correctamente las articulaciones del frío, más incluso si practicamos deporte en la calle, y es que habitualmente tendemos a descuidar el mantenimiento del calor corporal. No es necesario que las prendas que usemos sean de comprensión, ya que simplemente la función que deben tener es la de darnos calor, algo que normalmente se conoce como calentadores, que efectivamente tienen esa función, la de calentar las articulaciones. Existen en el mercado diferentes variedades de calentadores, ya que tenemos las de neopreno, que aguantan mejor la temperatura o las de tejidos sintéticos que pierden más calor, pero acaban siendo más cómodas a la larga. El uso de estas prendas nos  ayuda a conservar una temperatura homogénea a lo largo de todo el entrenamiento.
  4. Visitar al Fisioterapeuta, para descargar la musculatura contracturada y mantener la movilidad articular.

Estas medidas nos ayudarán a mantener unas articulaciones en plena forma, capaces de afrontar el día a día. Es importante que reparemos en la fragilidad de las articulaciones, sobre todo cuando bajan las temperaturas, ya que la presión que soportan es muy alta.

Asistir a clases de Pilates mejora considerablemente la el cuerpo y ayuda a prevenir el dolor articular provocado por el frío. Si deseas información sobre nuestras clases de Pilates o quieres concertar una cita para realizar un diagnóstico ponte en contacto con nosotros aquí. 

Fuente: https://www.alfisio.com/blog-fisioterapia/2011/02/fr%C3%ADo-y-dolor-articular.html